Son innumerables los tipos diversos de labores que se realizan en una granja agrícola, llegando incluso a poderse diferenciar la forma y el tipo de las labores que se realicen sobre un mismo cultivo en dos regiones o comarcas diferentes.
Esto se debe, fundamentalmente, a la costumbre o enseñanza adquirida por tradición, que suele estar muy arraigada en el sector agrícola y que puede tener su origen en la diversidad de terreno existente y en las diferentes regiones.
No obstante, vamos a diferenciar los tres tipos de cultivos fundamentales aceptados tradicionalmente junto con sus labores culturales, de forma generalizada.
Labores culturales en los cultivos arbóreos:
- Desfondes: labor profunda con volteo de tierra que se realiza antes de la plantación, por ejemplo, en el verano anterior. Estos desfondes pueden ser totales (con tractor o con animales de trabajo, con volteo o sin volteo de tierra); o parciales (en fajas -menos corriente- o en hoyos, con independencia de que haya volteo o no de la tierra).
- Despuntes: labor consistente en la supresión de la parte terminal de una rama buscando con ello el retraso del crecimiento en la vegetación de la misma, o bien, por el contrario, provocar su desarrollo.
- Aclareo: labor encaminada a la supresión de yemas de fruto o de ramas para conseguir que el resto fructifique y se desarrolle con más fuerza, aprovechando al máximo las posibilidades alimenticias que las raíces le transmitan.
-Desbrote: variante de la operacion anterior, consistente en la supresión de los brotes (aquí se eliminan los brotes y no partes de la rama como en el apartado anterior).
- Poda: es el conjunto de operaciones que se realizan sobre los tejidos vegetales de las plantas arbóreas, consistentes en la eliminación de ramas y organos vegetativos y las posible deformaciones de las mismas, encaminadas a conseguir un equilibrio en el desarrollo vegetativo del árbol o arbusto.
- Riego: es la dotación de agua de forma artificial a cualquier tipo de cultivo. Los riegos por inmersión a manta sólo se realizan en terrenos con una pendiente que no sobrepase el 2 ó 3 por 1000, mientras que los riegos por aspersión no suelen practicarse debido a la dificultad que presenta para su práctica la altura o vuelo de los árboles.
- Abonado: es la práctica de dar al suelo todos los elementos químicos que la planta necesita para su proceso productivo y de alimentación.
- Recolección: a mano o con ayuda de máquinas.
